miércoles, mayo 21, 2008

DIARIO DE UNA PÉRDIDA 7

El primer día ha sido difícil. No sé que hacer para no dar el paso hacia lo oscuro. Mi padre no está bien. Tiene el vientre lleno de un líquido amarillo oscuro que desde hoy le han empezado a drenar. Lo encontré cansado, apagado, débil. Presiento que la muerte anda cerca.

Te quiero viejito, te quiero con todo mi corazón. No te preocupes por nada, descansa.

Se alegró mucho al verme. Mis hermanas están desgastadas. Mi hermana mayor está sufriendo, no quiere aceptar la posibilidad de la pérdida. Debo ser fuerte, no puedo derrumbarme. No sé cómo, pero tengo que ser fuerte. Siento que esa es mi misión en este momento.

Imagen: Su nombre en la cabecera de la cama del hospital, por JAG