viernes, mayo 19, 2006

LA MUSICA CON LA QUE CRECI: DOS ILUMINADOS EN LA OSCURIDAD (primera parte)

Yo crecí escuchando METAL, era lo que en Lima llaman “METALERO”, y no me avergüenza decirlo puesto que encontré muchas cosas valiosas en esa música: la rebeldía, la fuerza para ir contracorriente, la voluntad para perseguir los sueños a pesar de todos y de todo. Pero, por sobre todas las cosas, el METAL me dio aquello que todos necesitamos cuando pasamos por ese luminoso y a la vez oscuro proceso de la adolescencia, la diferencia de los otros y la pertenencia a un grupo.

No sé si se trata del paso de los años y que empiezo a rehusarme a ellos, pero últimamente he estado a la caza de la música que me alimentó durante mi larga adolescencia, que, valga la aclaración, no termina aún y, creo, no terminará nunca. La cosa es que la semana pasada en mi usual incursión al centro de la ciudad en busca de libros y discos me tope de frente con el disco RANDY RHOADS TRIBUTE de OZZY OSBOURNE, como el mismo nombre lo dice, es un homenaje al estupendo guitarrista Randy Rhoads muerto en un accidente aéreo cuando recién empezaba a consolidarse en su carrera.
“He dudado mucho antes de sacar este álbum y por muchas razones, pero ahora, la señora de Rhoads y yo, sentimos que el momento ha llegado. Yo sé que su forma de tocar continuará inspirándonos a todos. Dios te bendiga Randy, mi amigo”, Ozzy Osbourne.

En este disco se juntan dos grandes del METAL y nos entregan uno de los mejores trabajos jamás grabados en vivo. Canciones como I DON’T KNOW, CRAZY TRAIN, MR. CROWLY o FLIYING HIGH AGAIN, son temas que tienen ya la bien ganada condición de clásicos. Es por ello que considero importante hablar un poco de estos dos grandes que el azar junto y separó en un encuentro breve (sólo grabaron dos discos BLIZZARD OF OZZ y DIARY OF A MAD MAN), pero, enormemente fértil para el rock mundial.

Sé que en este instante muchos pensaran en el Ozzy venido a menos que participa en un decadente reality show de MTV y querrán dejar de leer este post en el acto. Pero esperen un poco queridos lectores, porque juzgar a OZZY a partir de su imagen actual, no sólo sería un error, si no un crimen.


RANDY RHOADS, UNA GUITARRA PRIVILEGIADA

“Los guitarristas tienen algo con sus guitarras, son como extensiones de sus penes, pero en el caso de Randy, él era una extensión de su guitarra. Esa es una gran diferencia”, Ozzy Osbourne.

Randall William Rhoads nació el 6 de diciembre de 1956 en EL Saint John’ Hospital en Santa Mónica, California y, como presintiendo que su vida sería muy corta, empezó su aventura musical a los seis años y medio con la vieja Gibson acústica de su abuelo. Asistió a la Primera Escuela Luterana de Burbank. Luego fue a la escuela secundaria de la misma ciudad y se graduó en un programa especial con el único objetivo de recibir su diploma y continuar con la música. Era un excelente estudiante y siempre recibió buenas calificaciones. Estudio guitarra y, en la misma escuela, se desempeñó como profesor por cinco años hasta que conoció a Ozzy.
De gustos eclécticos, Randy creó un estilo muy particular en el que la gracia y la melodía de lo clásico se abrazan de manera única con la fuerza estrepitosa del rock. Punteos pentatónicos velocísimos, riffs melódicos a la vez que poderosos, un dominio absoluto de todos los recursos: licks, hammer-ons, pull off, legato phrasing, pero sobre todo y por encima de la técnica, el joven Rhoads era un apasionado de la guitarra: él era la melodía misma.

“Estábamos grabando DIARY OF A MAD MAN (la canción) y él no estaba contento con el solo. Me pidió que todos estuvieran fuera del estudio por algunos días. Salió del estudio dos días después con una gran sonrisa en el rostro. Escuché el solo y me erizó todos los putos vellos del cuerpo”, Ozzy Osbourne.
Antes de encontrarse con Ozzy, Rhoads, además de ser profesor de guitarra, formó parte del conocido grupo de rock QUIET RIOT con los que grabó dos discos que sólo fueron lanzados en Japón, por ese entonces tenía tan sólo 16.

En los últimos dos años y medio de su vida, Randy se interesó muchísimo en la guitarra clásica y tenía el claro objetivo de recibir un grado de Master en Guitarra Clásica puesto que quería llevar la fusión, con la que ya experimentaba, a límites insospechados. Pero el destino se interpuso.

Lo cierto es que antes que nada, Randy Rhoads era un gran ser humano, noble, de sentimientos claros y encantador, que, en su corta vida, logró convertirse en una influencia inevitable y en uno de los mejores guitarristas de la historia del rock.

Randy tenía 23 años cuando se encontró con Ozzy a mediados de 1979 y 26 cuando se encontró con la muerte.

OZZY ANTES DEL ENCUENTRO

El 3 de diciembre de 1948 en Birmingham, Inglaterra, al seno de una familia obrera, nació John Michael Osbourne. Pasó por la escuela a trancas y barrancas y fue allí donde sus compañeros le acuñaron el sobrenombre OZZY. Fue también en los pasillos de esa escuela donde conoció, y no de la mejor manera, al joven Iommi que disfrutaba maltratándolo y que después sería uno de los artífices del legendario grupo BLACK SABATH.

Desde su adolescencia su grupo favorito fue LOS BEATTLES. Al terminar la educación primaria se puso a trabajar como obrero y le dio inicio a una corta carrera delincuencial que terminaría con un breve paso por la cárcel que cambió su vida para siempre, porque fue durante esos días de encierro que OZZY descubrió que su pasión era el canto y, tras salir en libertad, desfiló por una serie de bandas hasta encontrar a los músicos con los que formó BLACK SABATH, una de las bandas fundadoras del METAL.

Después de un largo recorrido con la banda y a causa de su incontrolable problema con las drogas fue expulsado del grupo, hecho que lo dejó sumido en la más profunda depresión y con la clara idea de que todo había terminado. Pero fue en ese tiempo de autodestrucción absoluta que apareció Sharon Arden, la mujer que se convertiría en su agente y en su segunda esposa al contraer matrimonio el 4 de Julio de 1982 en Hawai (su primer esposa TELAM, lo dejó al no poder lidiar con su espíritu autodestructivo).

Fue Sharon Arden la gran responsable de la reconstrucción y el triunfo de Ozzy como solista. Fue ella la que logró convencerlo de su talento, y después de una lenta rehabilitación con sendas recaídas, impulsarlo a formar una nueva banda.

En un próximo post, hablaré del encuentro de estos dos virtuosos del METAL y de su corto pero intenso viaje hacia la fama, hacia la muerte.

PREGUNTA: ¿Cuál fue, querido lector, la música que te acompañó durante tu adolescencia?

IMAGEN1: “Metal”, fotomontaje por JAG.
IMAGEN2: Ozzy y Randy, fotomontaje por JAG.
IMAGEN3: Ozzy Osbourne
IMAGEN4: “Randy elevado”, fotomontaje por JAG.
IMAGEN5: Randy Rhoads afinando guitarra.
IMAGEN6: Randy Rhoads practicando.
IMAGEN7: Randy Rhoads en éxtasis musical.
IMAGEN8: “El príncipe de la oscuridad”, Ozzy, fotomontaje por JAG.
IMAGEN9: Ozzy en concierto.
IMAGEN10: Ozzy después del camino recorrido.