miércoles, agosto 09, 2006

UN HONGO QUE MATA: EL PEOR “NIÑO PEQUEÑO” DE LA HISTORIA

El domingo mientras caminaba con Jennifer por el barrio japonés me encontré con esta foto, y en el acto decidí escribir este post puesto que considero que es sumamente importante nunca olvidar.
CRONOLOGIA DE UN DESASTRE: 6 DE AGOSTO DE 1945

2:15 A.M.
El ENOLA GAY, el GREAT ARTIST y el NUMERO 91, tres bombarderos B-29, dejan la isla TINIAN y enfilan rumbo a Japón.

3:15 A.M.
Dentro del ENOLA GAY, se dispara una bala convencional sobre el compuesto de uranio para generar la reacción nuclear requerida y se procede a armar la bomba. La tripulación trabaja en silencio, solo se escuchaban las hélices del avión cortando la inmensidad del amanecer.

6:10 A.M
Radares japoneses detectan aviones estadounidenses. Se da la alerta en varias ciudades, incluso en HIROSHIMA. Los aviones vuelan a 9 kilómetros de altura. Pájaros de metal. Angeles de la muerte.

7:45 A.M.
El avión meteorológico STRAIGHT FLUSH le comunica al ENOLA GAY que hay un boquete de 16 kilómetros en el colchón de nubes que cubre HIROSIMA y se retira. El comandante ETHEARLY se convierte así en un cómplice más del desastre.

7:55 A.M.
TIBBETS, el piloto del ENOLA GAY le dice a la tripulación: ES HIROSHIMA. Al instante se comunica por radio con TINIAN y dice: PRIMARIO. Después, todo es el silencio de las hélices. Los dedos incrustados en el manubrio. El sudor resbalando tenso por las frentes.

8:00 A.M.
El operador del radar de HIROSHIMA levanta la alerta antiaérea al percatarse del reducido número de aviones. Los pobladores salen de los refugios antiaéreos y vuelven a la rutina del día a día. Un pedazo de cielo se dibuja entre las nubes como un símbolo de esperanza.

8:10 A.M. El ENOLA GAY viaja a 9,460 metros de altura. La ciudad se dibuja claramente a través del boquete en las nubes. Algunos pobladores del norte del HIROSHIMA ven dos aviones cortando el cielo. Pinceladas de cromo.
8:15:17 A.M.
El ENOLA GAY abre las compuertas y deja caer a LITTLE BOY (el nombre con el que se ha bautizado a la bomba atómica), y hace un viraje de 150 grados hacia el noroeste. LITTLE BOY corta el aire con el silbido imperceptible de la peor de las desgracias. No hay vuelta atrás. La tripulación del ENOLA GAY observa en silencio la parábola de la muerte.

8:16:43 A.M.
A 640 metros de altura, como estaba programado, LITTLE BOY estalla con una fuerza aproximada de 20,000 toneladas de dinamita.

16 MILESIMAS DE SEGUNDO DESPUES
Se abre una esfera de fuego blanca y brillante con una temperatura de 50 millones de grados centígrados.

25 MILESIMAS DE SEGUNDO DESPUES
La esfera vaporiza a todas las personas dentro de la clínica Shima y a todos los que circulan por debajo de donde se produjo el estallido. El calor y la presión instantánea vaporiza a más de 80,000 personas.

60 MILESIMAS DE SEGUNDO DESPUES
La esfera de fuego y radiación infrarroja carboniza a todo ser vivo en un radio de 1,5 kilómetros. La onda expansiva, con vientos de 800 kilómetros por hora y altas temperaturas, destruye todo lo que se encuentra en un radio de 2,5 kilómetros de distancia. Se percibe un sabor a plomo en el aire. A 20 kilómetros de distancia se ve el hongo atómico, el bramido de la explosión se escucha luego de un minuto.

5 SEGUNDOS DESPUES
Todo ha terminado. Vientos de más de 500 grados centígrados se expanden por toda la ciudad. Miles de personas en un radio de 10 kilómetros sufren incineración súbita, carbonización parcial y serias quemaduras. De entre los escombros y las lenguas de fuego surgen los sobrevivientes, quemados, mutilados, deshechos humanos arrastrando jirones de piel. Gritos, gemidos y llanto invaden el paisaje gris de la muerte. HIROSHIMA no existe más. El olor a muerte y a hongos quemados lo domina todo.

30 MINUTOS DESPUES cae sobre la ciudad una lluvia negra cargada de todo lo quemado y de la radioactividad dejada por LITTLE BOY.

TESTIMONIO DE GORDON THOMAS DESDE EL ENOLA GAY A 8,000 METROS DE ALTURA.

"Una columna de humo asciende rápidamente. Su centro muestra un terrible color rojo. Todo es pura turbulencia. Los incendios se extienden por todas partes como llamas que surgiesen de un enorme lecho de brasas. Comienzo a contar los incendios. Uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis... catorce, quince... es imposible. Son demasiados para poder contarlos. Aquí llega la forma de hongo de la que nos había hablado el capitán Parsons. Viene hacia aquí, es como una masa de melaza burbujeante. El hongo se extiende. Puede que tenga mil quinientos o quizá tres mil metros de anchura y unos ochocientos de altura. Crece más y más. Está casi a nuestro nivel y sigue ascendiendo. Es muy negro, pero muestra cierto tinte violáceo muy extraño. La base del hongo se parece a una densa niebla atravesada con un lanzallamas. La ciudad debe estar abajo de todo eso. Las llamas y el humo se están hinchando y se arremolinan alrededor de las estribaciones. Las colinas están desapareciendo bajo el humo. Todo cuanto veo ahora de la ciudad es el muelle principal y lo que parece ser un campo de aviación. Eso aún resulta visible. Allá bajo hay aviones”.
EL 9 DE AGOSTO DE 1945 a las 11:02 de la mañana, la devastación se repite sobre la ciudad de NAGASAKI.
61 AÑOS DESPUES los efectos de la radiación siguen manifestándose en los pobladores de HIROSHIMA, y nosotros poco o nada hemos aprendido, miles de cabezas nucleares se esconden en los almacenes bélicos, y la guerra sigue siendo un fantasma real con el que tenemos que convivir día a día. Entonces, HIROSHIMA y NAGASAKI como un tatuaje en la conciencia de los hombres, como un grito dantesco e infinito de todos aquellos que seguimos luchando día a día, palabra a palabra, por la paz mundial.

IMAGEN1: “Nunca olvidar”, fotografía por JAG.
IMAGEN2: “Bombardero B-29”, google image.
IMAGEN3: “Little boy”, fotografía de fondo y fotomontaje por JAG.
IMAGEN4: “Hongo que mata”, fotomontaje por JAG.
IMAGEN5: “Víctima de Hiroshima”, google image.
IMAGEN6: “Paul Tibbets, la máxima ironía”, google image.

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