Luis Hernández es uno de mis poetas favoritos y uno de los imprescindibles de la poesía peruana. La mayor parte de su obra poética quedó en cuadernos llenos de colores que repartió entre sus amigos. Le gustaba la vida del barrio, el mar, el surf y la buena hierba. Pero la vida resultó demasiado para él y el 3 de octubre de 1977, en Argentina, se arrojó a las líneas de un tren en marcha. Aquí les dejo uno de sus poemas.
HE VISTO
He visto a los monstruos del crepúsculo
Lanzar por odio a los jóvenes
Al fuego
Y llamar a este fuego, sagrado.
He visto manos decrépitas
Arrancando de los labios del muchacho
Su sueño
Y llamar a su fantasía vicio,
Y decirle esperanza de la patria
En una patria sin esperanzas.
Enjoyar a las jóvenes
Con telenovelas
Casos judiciales
Revistas femeninas
Y huevadas
Y llamarlas luego
Madres del futuro.
Y expender a la luz del día
El alcohol y la coca
Y negar el yodo al cretino
Y ocultar la rosa
Y quemar la ciudad
Y los perros y orinar.
Por eso envidio a Haendel
Ciego como un topo
Pero amado del Sol
Y de las ondas.
Pueden leer más sobre él y su obra AQUÍ y AQUÍ.
AQUÍ pueden ver uno de sus cuadernos.
Fotomontaje por JAG
