lunes, marzo 24, 2008

DURMIENDO

Me he pasado los últimos cuatro días lejos de esta realidad extraña. Solo aquellos que conocen la depresión saben de lo que estoy hablando; ese estado de sopor extremo; ese blando paraje de oscuridad y pena en el que uno se acurruca tibio de frío; esa niebla en la que uno se quisiera quedar envuelto para siempre.


IMAGEN: Nocturno, San Francisco, 2007, por JAG