“…los libros siempre acaban cobrando vida propia, y porque uno no escribe acerca de lo que quiere, sino de lo que puede.”
“Para escribir novelas no hace falta imaginación –dijo Bolaño-. Sólo memoria. Las novelas se escriben combinando recuerdos.”
IMAGEN: Osamenta, Punta Lobos, Lima-Perú, 2008. Por JAG.